– El buque MS Roald Amundsen, que rinde homenaje al reconocido explorador noruego Roald Amundsen, se ha convertido en el primer buque del sector cruceros bautizado en la Antártida.
– La madrina de la ceremonia fue Karin Strand, que forma parte del equipo de expedición de Hurtigruten desde hace 20 años y suma un total de 140 viajes en la Antártida a sus espaldas.
– El crucero híbrido se une así a los viajes de exploración de Hurtigruten en la Antártida durante la temporada 2019/2020, antes de regresar a Alaska durante el verano del próximo año.
Hurtigruten continúa haciendo historia. MS Roald Amundsen, el primer barco híbrido de la compañía y del sector cruceros, además de ser pionero en cruzar el Pasaje del Noroeste, es el primer barco bautizado en la Antártida. El MS Roald Amundsen rinde homenaje al reconocido explorador noruego Roald Amundsen, quien bautizó con hielo a su barco, el Maud, en 1917.
La ceremonia del bautizo se llevó a cabo en las inmediaciones de Charlotte Bay el pasado jueves 7 de noviembre, con la participación tanto de la tripulación como de los pasajeros procedentes de más de 20 países.
La madrina del acto ha sido Karin Strand, Expedition Leader de Hurtigruten con más de 20 años de experiencia en los viajes de exploración y un total de 140 viajes en la Antártida, razones de peso para elegirla.
Karin Strand se alejó del tradicional bautismo con champán para bautizar en este hito histórico al MS Roald Amundsen con un bloque de hielo mientras recitaba las palabras de Amundsen en el bautismo original: «No es mi intención deshonrar la uva gloriosa, pero ahora ya tendrás el sabor de tu verdadero ambiente. Porque en el hielo te has construido, en el hielo permanecerás la mayor parte de tu vida y en el hielo resolverás tus tareas».
Los huéspedes del MS Roald Amundsen siguieron la ceremonia de bautismo desde botes de exploración, a quienes se les unió pasajeros y tripulación del MS Midnsatsol de Hurtigruten, que también realiza recorridos por el Continente Blanco durante la temporada.
“Creo que el propio Roald Amundsen estaría orgulloso. Con este barco, que porta su nombre y legado, Hurtigruten expande sus fronteras, desafiando a la industria y avanzando hacia un modelo más verde y sostenible de operaciones. Al igual que Roald Amundsen, que era un símbolo de una nueva era de exploración, el MS Roald Amundsen es un símbolo de una nueva era en la industria de cruceros”, ha dicho Daniel Skjeldam, CEO de Hurtigruten que acudió al acto.
Durante la ceremonia, Skjeldam reveló que Karin Strand había solicitado que el tradicional regalo a la madrina fuera donado a la Fundación Hurtigruten, destinada a contribuir a la preservación de las áreas que la compañía explora durante sus viajes.